Elisenda Nadal vivió el lunes un «precioso flashback» en la Academia de Cine, institución en la que recogió el Premio de Comunicación Alfonso Sánchez 2023 en un emotivo acto en el que estuvo acompañada por su familia, amigos y profesionales del cine.
La veterana periodista que dirigió durante más de 40 años la revista ‘Fotogramas’ no ocultó lo «conmovida y nerviosa» que estaba por recibir un galardón “que me devuelve a la persona que fui y que ya no soy porque mi mundo, ahora, es otro. Un mundo irrepetible que compartí con muchos amigos que ya no están». Nadal recordó a Alfredo Matas –»que en 1985 me habló de lo que fue el embrión de esta Academia»–, Amparo Soler Leal, Borau, Terenci Moix, Pilar Miró, Ricardo Muñoz Suay, Paco Rabal, Carlos Saura, Fernán-Gómez, Emma Cohen, Ángel Casas, y Bigas Luna, entre otros–, y rememoró aquel período, «en el que se abría paso el llamado Nuevo Cine Español, la transgresora Escuela de Barcelona, el Nuevo Periodismo y tantas corrientes alternativas de las que ‘Fotogramas’ fue aglutinadora, y en el que un grupo de jóvenes periodistas, escritores y cineastas volcamos inquietudes, ilusiones, pasiones, ideologías y, sobre todo, muchas ganas de que la realidad fuera menos gris”, declaró.
Conocedora desde muy joven de las interioridades del mundo editorial, Elisenda Nadal no habló desde la nostalgia, sino desde la certeza «de que me ha cambiado el mundo: los amigos, las pantallas, las revistas, las películas…Ha cambiado, pero para bien, hoy asistimos a la maravilla de tantas y tan talentosas mujeres haciendo cine y cosechando premios. En mi época, las mujeres no podían hacer cine», manifestó la premiada, que no se olvidó de su padre, Antonio Nadal-Rodó, fundador y creador de la revista, «que dándome libertad absoluta me traspasó la dirección de ‘Fotogramas’ sin que me diera cuenta del peso que tenía aquel relevo»; de sus hijos, Toni y Jesús Ulled Nadal; sus nietos; y su marido.
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Agradeció a la Academia el reconocimiento que le habían concedido y que le entregó el presidente de la institución, Fernando Méndez-Leite, “quien también forma parte de ese mundo que tuve la suerte de disfrutar y que este premio me ha hecho revivir», resaltó Nadal, que escuchó «sorprendida y muy ilusionada» las palabras que le dedicaron los periodistas Toni Ulled, Paula Ponga y Maruja Torres en el acto que condujo Anabel Alonso y al que asistieron, entre otros, Marisa Paredes, Julieta Serrano, Pedro Olea, Vicente Molina Foix, Alfonso Albacete, Helena Fernán-Gómez, Teresa Font, María Luisa San José y Cristina Fernández Cubas.
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La jefa, la amiga, la madre, la maestra
“No se entiende la cinefilia de este país sin su cabecera histórica, y no se entiende esa cabecera sin Elisenda Nadal”, indicó Méndez-Leite, que se autodefinió como “chico ‘Fotogramas’, publicación en la que durante dos años escribió la crítica de teatro.
‘Fotogramas’ tiene una línea sucesoria. Elisenda Nadal tomó el testigo de su padre y ella se lo pasó a su hijo, Toni Ulled, que explicó todas las «cosas de las que me he acordado» al ponerse a escribir su madre. De cuándo le llevó a ver al cine Adiós muchachos con 12 años; “de las renuncias, los sufrimientos, los esfuerzos y las dificultades de un trabajo que, por otro lado, le ha dado tantas y tantas gratificaciones”; y de las lecciones que le ha dado. “Nada es tan importante; la humildad, la alergia al ego; y que para saber si un texto es bueno, no es imprescindible escribir. Nunca le he visto redactar más de un párrafo, pero si he visto párrafos tachados, cambiados de lugar, cortados, simplificados… Mi madre es una editora enorme”, subrayó.
“Elisenda me dio la oportunidad de aprenderlo casi todo sobre periodismo cinematográfico. Contigo aprendí a no ser complaciente con el entrevistado, a reconocer enseguida esas entrevistas complacientes o soberbias y a combinar la cinefilia con los detalles personales que siempre espera el lector”, resaltó Paula Ponga, que dedicó 33 años de su vida a ‘Fotogramas’. Ahora, Nadal, de quién destacó su olfato “para los temas, para formar equipos, y su superdotada memoria visual”, ya no es su jefa, “es mi amiga”, subrayó.
‘Escribe como hablas’. Este fue el consejo que recibió Maruja Torres al principio de su trayectoria de Elisenda Nadal. Y la escritora y periodista hizo caso a su amiga, a la que recordó con un cordel al cuello “para confeccionar ‘Fotogramas’, donde cabía todo el mundo, siempre que tuvieras talento” y con la que siempre evoca “lo bien que lo hemos pasado”.
Rosa Montero, Manuel Hidalgo, J.A Bayona, Boris Izaguirre, Isabel Coixet, Lola Salvador, Jaume Figueras, Joan Manuel Serrat y Jesús Ulled también felicitaron vía vídeo a la periodista, que recibió el Premio de Comunicación 2023 “por su constancia y capacidad de innovación en la dirección de ‘Fotogramas’ y su inteligencia para descubrir las firmas más talentosas”.
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